Una francesa en México

En este blog, te voy a contar mi experiencia como francesa viviendo en México. En primer lugar, todo comenzó en julio de 2019, fui a México en un intercambio universitario con mi hermana. La primera impresión de México fue obviamente el entorno en el que estábamos, vivimos en la Ciudad de México, la capital que es una de las más pobladas del mundo, con unos 8 millones de habitantes. Cuando dejas un pequeño pueblo en Francia como Orleans y llegas a México después de 15 horas de vuelo, puedo decirte que el choque cultural es inminente.

Durante mi estancia, descubrí algunas diferencias entre mi país y México que a continuación les mencionaré:

Gastronomía

Obviamente, lo primero que me llamó la atención fue la comida, hay comida en todas partes, quioscos en la carretera, los grupos de comerciantes que venden comida local. Además, se supone que, en México, cada estado tiene su propia gastronomía, en contraste de Francia, donde la “baguette”, el queso y el vino son los platos típicos de nuestra gastronomía. Lo más difícil para mi como francesa viviendo en México fue  adaptarme  al “chile”, de hecho, para mí que no como nada picante, era lágrimas en los ojos y la boca ardiente garantizada en cada mordisco. Mi platillo favorito son las quesadillas, soy una fanática del pescado, las mejores que comí eran de camarones y queso en el estado de Oaxaca. Realmente los tacos que estaba acostumbrada a comer en Francia son completamente distintos a los mexicanos.

Cultura y religión

La cultura mexicana es muy hermosa. La gente es agradable, atenta y adora a los extranjeros, especialmente a los franceses. Siempre están ahí cuando es necesario, para ayudar, la cultura es muy feliz y abierta. Son personas que tienen la alegría de vivir, y que también tienen la fiesta y el baile en la sangre. Se las arreglan para combinar el trabajo y la vida cotidiana, y al mismo tiempo disfrutan de la vida, eso nunca lo pudo hacer en Francia.

Por otro lado, la religión también es muy importante para ellos. Tuve la oportunidad de experimentar una fiesta típica llamada “Dia de Muertos“, fui  a visitar una ciudad donde la tradición es muy fuerte, en Michoacán, Pátzcuaro. Para ellos, hay tres días de celebración, un día para los animales, uno para los niños y finalmente, otro para los adultos. Por otro lado, en cuanto a su creencia, es la época del año en que los muertos regresan y donde pueden estar juntos, duermen al lado de su caída, ofrecen muchos regalos, comida, flores, velas, todo tipo de cosas, que hacen que los cementerios sean lugares hermosos, relajantes. Es como si daban a su ser querido que falleció, gracias a sus presentes, en otras palabras, dando vida a la muerte.

¿ POR QUÉ LOS FRANCESES AMAN VIVIR EN MÉXICO?

Viajando y estudiando en otro país

Viajé mucho, tuve la oportunidad de conocer a muchas personas de intercambio, especialmente de América Latina, que descubrieron México al mismo tiempo que yo, teníamos el mismo deseo y la misma curiosidad por el descubrimiento de este hermoso país. Uno de los estados que más me gustó fue Oaxaca, contrariamente a la creencia popular, Yucatán es una zona turística muy hermosa que también tuve la oportunidad de visitar, pero también muy turística, que no refleja la realidad, especialmente en términos de costo de vida y cultura mexicana. Otro de mis lugares favoritas fueron las ruinas prehispánicas,  aquí,  tuve la oportunidad de verlas, y realmente es impresionante, parece retroceder en el tiempo, tuve la impresión de haber regresado en la caricatura de las ciudades de oro. Lo que me dejó sin palabras es la altura y el espacio que ocupan estas pirámides, son tan imponentes que uno casi se sentiría mareado.

Espero te haya gustado mi experiencia como francesa en México, ¡No puedo esperar para viajar de nuevo por este hermoso país!

 Diva Ribeiro |Editorial Be México